13 de junio de 2008


Escher

La Fata Morgana es un espejismo que engaña.
Cuando me veo en el espejo no me engaño.
La temperatura de mi pensamiento se enfría
al contacto con lo externo y no brilla.
Del frío nacen agujas de misterio.
No hay espejismo en lo desconocido.
La mirada que se fija en la mía
ni siquiera vislumbra un atisbo de la suya.


.

No hay comentarios: